El cerro del Pan de Azúcar es un espectacular pico monolítico de granito, prácticamente sin vegetación, que se alza directamente sobre el mar como parte de una península que se adentra en el Océano Atlántico.

De los muchos morros que hay en la ciudad, el Cerro Pan de Azúcar es el único con estas características, lo que le confiere un encanto incomparable y permite que, desde su cima, a 396 metros de altura, se tengan vistas privilegiadas de Rio de Janeiro y la Bahía de Guanabara, y es, junto al encantador Corcovado, uno de los emblemas de la ciudad,

El pico es de granito y cuarzo, y está cubierto por la frondosa vegetación atlántica de la región.
El origen del nombre responde a dos teorías. Para algunos proviene de la similitud del morro a los antiguos panes de azúcar, de forma redondeada. Para otros, la denominación deriva del tupí-guaraní «Pau-nh-acuqua», que significa “ alta colina”. Sea cual sea la raíz de su designación, lo cierto es que el morro ha fascinado desde hace siglos a quienes pisan Rio de Janeiro, siendo el centro desde el cual se edificó la ciudad en el siglo XVI. Este icono carioca sigue acaparando hoy la atención diaria de miles de personas que recorren sus laderas y disfrutan la vista desde su cumbre.

Muchos de los visitantes deciden ascender a la cima escalando, pero sin dudas el modo más tradicional y cómodo es mediante el teleférico (bondinho), en funcionamiento desde 1912. La ruta de los teleféricos hacia la cima se lleva a cabo en dos tramos: el primero de ellos va desde la Praia Vermelha hasta una altura de 220 mtos. sobre el nivel del mar y realiza la parada en la cima del Morro da Urca. La segunda parte del trayecto llega hasta el Pao de Azúcar, a 750 mtos. y es desde allí donde se aprecian las mejores vistas. El horario ideal para ascender es durante la puesta del sol. Los teleféricos son 2 y parten cada 30 minutos desde Praza General Tiburcio en Urca.

Precio :  R$ 62 / US$ 27. ( entrada general )

               R$ 31 / US$ 14  ( niños de entre 6 y 12 años, estudiantes brasileños y los adultos  

                                             Mayores de 60 años ) y los menores de 6 años montan gratis.

El Bondinho se encuentra ubicado en el Barrio de URCA. Un barrio tradicional de Rio de Janeiro. Para utilizar el Bondinho, la estación principal en tierra se encuentra entre el morro da Urca y el morro da Babilonia, muy cerca de la Praia Vermelha.

El teleférico realiza un recorrido dividido en varios tramos: el primero conduce desde la playa Vermelha hasta el Morro de Urca, con el Cristo Redentor como telón de fondo. Desde aquí cogemos de nuevo el teleférico, que nos lleva hasta el propio Pan de Azúcar. Las vistas desde su mirador son, simplemente, impresionantes.

Para llegar al teleférico podemos hacerlo en metro (estación Botafogo) y coger el omnibus 513 hasta Urca. También se puede llegar en taxi desde Copacabana, que está relativamente cerca, pero evidentemente es mucho más caro.

Te aconsejo que trates de visitarlo un día despejado para que puedas disfrutar de una maravillosa panorámica de Río de Janeiro: los aviones que lo bordean antes de aterrizar, los barcos que se adentran en la bahía y la agitada vida de sus barrios.

El atardecer, cuando el cielo se torna en espectacular follaje con el Cristo de telón de fondo sobre el monte Corcovado, y las playas cariocas quedan a nuestros pies.

Además del famoso teleférico o bondinho del Pan de Azúcar , también se puede llegar a la cima de este magnífico monumento natural caminando a través de un sendero, lo que resulta mucho más emocionante y atractivo. El sendero sigue los pasos de Henrietta Carstairs, una mujer inglesa, quien en 1817 realizó la primera ascensión históricamente comprobada a la gran roca. Cuando llegó a la cima izó la bandera de Gran Bretaña en la parte más alta pero su hazaña no duró mucho, puesto que al día siguiente un soldado portugués arrancó la bandera británica y la sustituyó por una portuguesa. La ruta comienza en la Playa Vermelha dónde en su extremo izquierdo se encuentra la entrada de la pista Claudio Coutinho. Es un agradable paseo asfaltado bajo los árboles desde dónde se contempla el mar rompiendo en las rocas y al fondo la isla Cotonduba, el morro de Babilonia y el Fuerte de Leme. Después de unos 20-30 minutos se llega al final de la pista y comienza realmente la aventura. La caminata se vuelve más técnica, alternándose trechos de senda a la orilla del mar, con rampas de piedra y miradores espectaculares. Después se inicia una subida que será constante hasta el final de la senda.  Cerca ya del objetivo, la inclinación del camino es tan pronunciada, que se necesita equipo básico de escalada para sortear un tramo de pared de unos 15 metros. 

No es necesario tener experiencia en escalada, sólo es necesario tener un mínimo estado de forma. Finalmente, después de unos pocos minutos más de ascenso, se alcanza la cima del morro, desde dónde se accede a la terraza y a la estación del teleférico. Una vez allí, es momento de descansar y recuperar fuerzas mientras se contempla una de las más hermosas vistas de Rio de Janeiro. Para descender lo más cómodo es utilizar el teleférico que cubre el tramo desde la cima hasta el Morro de Urca. Una vez allí, se puede abordar el segundo tramo de teleférico o bien, si aún quedan ganas y fuerzas, descender realizando el camino inverso del trekkings al Morro de Urca, que desemboca de nuevo en la pista Claudio Coutinho y la Vermelha. Estación de Teleférico de Pao de Azúcar

Dirección: Avenida Pasteur 520, Praia Vermelha
Teléfono: (21) 2546 8400
Página web: www.bondinho.com.br
Transporte: Autobús 107 desde el Centro, Flamenco y Botafogo; autobús 511 o 512 desde              

                     Copacabana , Ipanema y Leblón